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miércoles, 13 de mayo de 2015

ADVERTENCIA A LOS FALSOS PASTORES

Antes de decir lo que me ha dicho el Señor, quiero aclarar que yo no estoy en contra de los pastores. Sé de la hermosa obra y del gran esfuerzo que muchos hacen por enseñar y cuidar las almas que Él rescata.
Así es que esta visión no es para ustedes, es para aquellos que usando el título de pastor abusan de él y se benefician desde hace muchos tiempo, y también para aquellos que siendo llamados al pastorado, en estos últimos años se han dejado seducir por Satanás para olvidarse de la promesa que le hicieron al Señor años atrás. Por lo tanto, si tú querido pastor tienes tu conciencia limpia delante de Dios, no te sientas identificado por favor, ya que esta profecía es para aquellos hombres que usan el pastorado con auto-beneficio, es para aquellos que saben internamente que están llenos de concupiscencia y de maldad, es para aquellos que han robado el dinero de las ofrendas, es para aquellos que han abandonado a sus ovejas, es para aquellos que Se han enriquecido con el evangelio. 

Esto es para ti que crees que puedes a Dios engañar, y que acudiendo a su misericordia podrás entrar al cielo. Cuán equivocado estás. Es para ti que dices ser PASTOR EVANGÉLICO. No para un sacerdote católico o luterano. Es para ti que juegas con Dios. Recuerda lo que Jesús dijo en Mateo 7:21-23..."Muchos me dirán en aquel día...Señor, Señor, no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos milagros"? y entonces les diré...Nunca os conocí, apartaos de mí, hacedores de maldad."

Esto que dijo el Maestro hace 2000 años es para ti que ocupas un lugar en que debes actuar con total santidad en la congregación de los hermanos de iglesias evangélicas, pero que en cambio usas tu posición ministerial para servirte a ti mismo.

Después de leer y escuchar lo que he recibido, pido al Señor que en vez de enojarte conmigo, por favor te arrodilles delante de Dios, le pidas perdón y te arrepientas de toda tu maldad, porque te aseguro que sino lo haces, sufrirás en el infierno eternamente. No podrás entrar en el Reino de los Cielos. Por amor a Dios pídele perdón de corazón sincero al Señor, arrepiéntete y comienza a caminar en santidad delante de Dios.

Ahora escucha lo que Dios te dice...